Casi un mes y medio después que la ONU aprobó extender la plataforma marítima de la Argentina, la cual incluye a las islas del Atlántico Sur y la Antártida, la petrolera Rockhopper Exploration reveló el hallazgo de un “yacimiento de clase mundial” en el área marítima Sea Lion, al norte de las Islas Malvinas.
El presidente de la empresa, Pierre Jean-Marie Henri Jungels, realizó el anuncio en la última asamblea de accionistas de la compañía. Según dijo, se trata de un “logro fabuloso”, comparable a las reservas que reporta en Argentina la compañía privada Pluspetrol.
“Se confirmó el tamaño del Sea Lion como un yacimiento de petróleo de clase mundial”, dijo a sus accionistas Pierre Jean-Marie Henri Jungels, y prometió convertir a la cuenca norte de las Islas Malvinas en una “nueva provincia productora de hidrocarburos”.
“Este fue un logro fabuloso para un pequeño equipo, hábilmente dirigido por su nuevo CEO, Sam Moody. No todos los operadores logran este resultado con equipos a menudo considerablemente más grandes”, resaltó Jungels.
Rockhopper anunció que sus reservas netas de petróleo se duplicaron a más de 300 millones de barriles, mientras expertos independientes estiman que la cuenca tiene un potencial de casi 1.000 millones de barriles, un nivel similar al que reporta en la Argentina la firma local Pluspetrol (otra operadora mediana, Panamerican Energy, tiene reservas por 1.600 millones).
Los hallazgos offshore se encuentran en un área en litigio entre el país y el Reino Unido, y corresponden a una operatoria cuestionada en Naciones Unidas y en otros foros internacionales, al punto que el anterior gobierno juzgó “ilegal” la exploración y producción de hidrocarburos en la zona.