Pasadas las 9 de la mañana comenzó el juicio en los tribunales de Campamento YPF contra el abogado y oficial policial, Walter Nievas, ante el Tribunal de Juicio Oral, por las 74 personas que lo acusan de estafador.

El acusado acaro que es el “único responsable “y aseguró que, “en ningún momento quise causar un perjuicio económico, fiscal, muchos menos estafar, actuar de mala fe o causar un daño”.

Aseguró que el negocio comenzó en el 2020 porque, “clientes que tenía (en el estudio de abogados), me preguntaba si conocía personas que prestaban dinero o yo prestaba y en la comisaria me consultaban, porque tenían un dinero extra y quería sacar el mejor provecho”.

Ante esto, “actúo como intermediario de las personas que necesitaban un capital y las personas que tenían un capital” y para esto, “labraba contrato de mutuo”.

El detalle no menor es que admitió que, “lo hacía a nombre mío, me ponía de intermedio era porque había un desconocimiento entre las personas”, sin embargó aseguró que, “no tenía poder”, para hacer eso y que, “a los fines prácticos actuaba de intermediario con las personas”.

Por esto nexo que hacía, “me llevaba una comisión, por mi intermediación, mi labor”.

Recordó que en el 2021 tuvo una complicación médica, “estuve unas semanas inactivo, y se producen atrasos en los plazos” y cuando tuvo el alta, “regularizo esa situación ya que las partes no se conocían”.

Nievas aseguró que su negocio era tan prospero que, “empieza una divulgación de las personas y aparecen más personas que quieren” sumarse. “Ahí comienza la figura del inversor”, admitió.

En este sentido aseguró que, “se malinterpretó, no se aclaró y me hago responsable de haberla utilizado y no haber sido claro respecto a ellos. Inversor era la persona que prestaba el dinero”.

“He dicho que he sido una persona que trabaja en la bolsa, pero la realidad no es de esa manera”, dijo, pero considero que las personas se sumaban no por eso, sino que “venia por el boca a boca” y que, “algunos no preguntaban respecto al origen de los fondos o como se retribuía”.

Continuado con el relato, dijo que a “fines de marzo o principio de abril de 2023 no tenía ni una carta documento, ahí es donde comenzó el devenir de todo esto”., de lo que “me hago responsable de no poder afrontar”.

Detallo que “ nuevamente se sucitó un bajón en cuanto a mi situación de intermediario de estas personas, pero estaba convencido que iba a poder afrontarlo”.

“La plata esta entre las personas que dieron el dinero y las que cobraron. No use la plata,”, aseveró y agregó que el dinero, “se fue utilizando para hacer los pagos a otras personas, el dinero que ingresaba automáticamente salía, que eran personas que formaban parte del acuerdo”.

En esa feca tenía previsto un viaje para bautizar a su hija y estando de licencia, “se contacta mi ex socio y me comenta una situación que se había suscitado en el estudio”, donde un persona, “exhibió un arma de fuego”.

Nieva afirmó que, “le comento a mi familia de origen y les comento que había pagos que no podía realizar, vencimientos ya cumplidos y que iba a regularizar la situación” y le prestan dinero.

“Ahí empiezo a contactar a las personas, las cito, les explico la situación, escucho sus pretensiones y yo deseaba pagarles, retribuirles a los damnificados, realmente lo deseaba, pero temía por mi integridad”, aseveró.

“Por cómo se venían dando esas charlas con esas personas, estaban ofuscados y hacían comentarios como si no está la plata, puede suceder tal o cual cosa”, recordó y justificó que, ante esto, “saco un pasaje y me voy fuera de la provincia, el 9 de agosto del año pasado, con destino a posadas. Mientras tanto acá explotaba todo”.

Una vez allá, “me doy cuenta que se vieron involucradas terceras personas, decido avisarle a mi ex pareja donde estaba, a sabiendas que eso se iba a divulgar”.