Mañana se inicia en Ushuaia el juicio oral y público al conductor que protagonizó un terrible siniestro vehicular sobre la avenida Maipú el 5 de septiembre pasado, matando a sus dos acompañantes.
Una de sus víctimas, Iara Talía Babi, tenía 26 años y era mamá de un nene que hoy tiene 4 años (foto), “ella vivía sola con el nene, ese día el papá le tocaba la visita y se lo llevó temprano. Le pedí que viniera a casa para no estar sola en el departamento y me dijo que se quedaría mirando una novela por Netflix que iba a poder verla tranquila”.
Su mamá, Violeta, comentó que la joven aparentemente fue invitada a dar una vuelta en auto esa madrugada, cuestión imprevista, “con un cerrajero entramos al departamento y vimos que había salido sin documentos ni billetera, ella cobró esa noche y no tocó el sueldo. Salió hasta sin campera, salió a dar una vuelta”, comentó, agregando, “nosotros nos enteramos lo que había pasado después de las 12 del mediodía que nos llamó nuestro hijo desde Puerto Madryn y le decíamos que no podía ser, que ella se había quedado en su casa esa noche”, señaló.
“A mi hija no le gustaba la velocidad, me imagino la desesperación que habría sido de ella una o dos cuadras antes del accidente”, dijo su mamá a partir de lo que se pudo determinar en la causa de la mecánica del accidente que incluso quedó registrado en cámaras de seguridad.
Ante ello la familia de la joven fallecida, que se presentará como parte querellante, solicitará, “que se cambie la carátula de este caso, esto no fue un accidente, no había hielo era una mañana soleada no había nadie circulando, y este tipo manejando como un loco a 130 kilómetros por hora”, señaló la madre de la víctima.
El imputado, Rodrigo Ángel Flores Talquenca, asiste al juicio con los agravantes de haber dado positiva una alcoholemia en 1.37 g/l de alcohol en sangre, y una pericia toxicológica que mostró rastros de estupefacientes en su organismo.