Juan Carlos Sosa de 65 años (foto) falleció el pasado 5 de octubre, lo que derivó al día siguiente en la radicación de una denuncia por parte de su familia a fin de que se investiguen las circunstancias que llevaron a la muerte de este hombre que trabajaba como operario de la fábrica BGH.
Sosa ese fin de semana de principios de este mes había tomado parte de un asado con compañeros de trabajo, tras un partido de fútbol, retornando a su domicilio.

Al día siguiente, el domingo 3 de octubre, aquejaba un fuerte dolor por lo que fue trasladado a la guardia del Hospital Regional Río Grande, donde fue atendido por un profesional médico, de apellido Campos, quien le prescribió estudios a realizar por este malestar.

Sosa además presentaba una especie de hematoma en la misma zona, por lo que en la denuncia la familia consigna que a pesar de este conjunto de indicios, los estudios prescriptos no precisaban atención de urgencia alguna, refiriéndose que eran para tramitar en el transcurso de la semana.

Sosa volvió a descompensarse ese mismo domingo e ingresó al nosocomio, diagnosticándose allí un desgarro en la zona del hígado que no fue advertido a tiempo por lo que el 5 de octubre finalmente falleció.

Ante la denuncia toma intervención el juzgado de instrucción 1, a cargo del Dr. Daniel Cesari Hernández, que dispuso el resguardo del cuerpo a fin de realizar la autopsia correspondiente que determine de modo fehaciente si pudo existir negligencia médica alguna, tal cual lo expone la denuncia, así como la causa de la severa lesión que presentaba.