El espectáculo de música y luces agotó rápidamente las localidades que se entregaron por auto, con una organización que buscó impedir el descenso de las personas del habitáculo, a fin de mantener el protocolo preventivo de COVID.

Distintos dee jay´s de la ciudad se sumaron a la movia desde la ARDAF, agrupación que los concentra, y desde la cual César planteó, “fue un año muy duro para nosotros, sin trabajar desde marzo y algunos amigos que no trabajan desde el año pasado, esta iniciativa marca la vuelta, el reencontrarnos con la gente pero recordar que nuestra actividad aún no cuenta con protocolo alguno para que podamos volver a la actividad”, señaló.

Ante ello plantearon la necesidad de la continuidad de eventos de este tipo, como el que en este caso se organizó desde Juventud de Gobierno, pero con un público acotado en cuanto a entradas disponibles y eventual demanda, ya que se buscó un predio cerrado como es el de una concesionaria en el parque industrial, a fin de evitar la concurrencia de personas de a pie.