El conductor imputado por la tragedia de octubre de 2021 dijo que esa noche era su cumpleaños y solo había tomado un vaso de cerveza para luego llevar a sus hijos a la casa de su madre.
Al regresar aseguró que no vio a los chicos y que «una sombra» saltó desde el cantero central y solo observó los pies de uno de los chicos pasando por sobre el parabrisas.
En este sentido refirió «no iba en exceso de velocidad, iba a mi casa sin ningún apuro y atento» ya que además incluso se probó no portaba siquiera su celular consigo.
Asimismo expresó que los jóvenes nunca cruzaron y que solo sintió el golpe, ante esto los padres de Santiago señalaron «no hay que defenderse con mentiras» tras lo cual el tribunal llamó a orden.
Allí Sopena indicó «yo entiendo a la familia, pero no soy un asesino», dijo entre lágrimas en una emotiva declaración. «Esto es una tragedia para Santiago, para su familia y para mí», resumió.
