El ministro de Gobierno, José Luis Álvarez, asistió a la charla brindada por la UNTDF sobre esta problemática que viene creciendo en el mundo, a partir del auge de las redes sociales. Aseguró que se viene trabajando conjuntamente con la Justicia y en proyectos de reforma penal que incluyan esta modalidad de acoso a menores.
Se denomina “grooming” a una serie de conductas y acciones deliberadamente emprendidas por un adulto con el objetivo de ganarse la amistad de un menor de edad, creando una conexión emocional con el fin de abusar sexualmente de él. En algunos casos, también es la introducción del menor al mundo de la prostitución infantil o la producción de material pornográfico. Es cada vez más común en las redes sociales para lograr contacto directo con posibles víctimas de acoso moral, abuso o muerte.
El ministro Álvarez aseguró que “venimos trabajando desde la Secretaría de Derechos Humanos en conjunto con el Superior Tribunal de Justicia” en la elaboración de políticas para combatir este delito. Asimismo, señaló que “hemos tenido una reunión de coordinación con el Superior Tribunal” para establecer un eje de trabajo con alumnos y docentes de nivel primario y secundario. “Vemos con alegría que la Universidad forme parte de todo esto” destacó el funcionario.
“El grooming necesita un tratamiento legislativo a nivel provincial” respecto de lo que son los elementos probatorios del delito. También “estamos trabajando en proyectos referentes a la reforma procesal que se viene en la Provincia. El grooming, desde lo legal, es una situación delictiva que necesita ser atacada” remarcó el funcionario.
Álvarez informó que ante cualquier situación que sufra cualquier ciudadano, “en la Secretaría de Derechos Humanos hay una psicóloga que se encarga de atender todas las situaciones” y también “contamos con un asesor letrado ante las situaciones riesgosas que puedan aparecer”.
Por su parte, el profesor encargado de dictar el curso, Aníbal Lazzaroni, explicó que “esta charla es informativa y formativa” y que el objetivo “es poder plantear ejes de trabajo con los chicos y futuros docentes que nos permitan mitigar este problema en el cual recién se está empezando a trabajar y no tenemos que descuidar”.
Lazzaroni señaló que lo principal que hay que hacer es “apoyar mucho a la familia” y que, si bien las instituciones están preparadas para llegar a apoyar la necesidad del chico, “lo importante es darle herramientas a la familia para que puedan sostener y detectar esto”.