Un grupo de contratados del grupo Mirgor, con contratos sucesivos desde los años 2020 y 2022, vieron finalizado el vínculo con la empresa y no volvieron a ser convocados.

Los contratos vencieron al 1 de septiembre y se encontraron sin su fuente laboral,  a sabiendas de que la empresa continúa convocando nuevos trabajadores.

Ante ello los trabajadores desplazados aseguran que son cerca de 300 personas las que pasan a ser desvinculadas, tras lo cual se hacen presentes en la sede de la Unión Obrera Metalúrgica en Río Grande a fin de reclamar una respuesta o acción sindical.

La modalidad de contrataciones por tiempo indeterminado en el sector fabril permite a estas empresas continuar con esta modalidad contractual que no se repite en ningún otro campo productivo o comercial, con la histórica anuencia del sindicato metalúrgico.