Un equipo encabezado por el Dr. Julio Ghione, abogado de veteranos de guerra, llegó a la ciudad para investigar dónde pueden estar enterrados soldados ingleses que presumiblemente fueron abatidos por la marina de guerra argentina en 1982. Las pruebas que aducen tener apuntan a la Operación Micado, como se conoce a hechos ocurridos entre el 16 y 17 de mayo de ese año.
El abogado viajó a Río Grande en el marco del reconocimiento a muchos militares que reclaman pensión de guerra. “Hay unos cuarenta actores en juicio ya y también hay gente que se ha entrevistado con nosotros porque han vivido esa época y sabemos que en el enfrentamiento de los gomones (Operación Micado) fallecieron ingleses, entonces, venimos a investigar los restos de dónde están enterrados”.
“Mi visita tiene que ver con muchos suboficiales que incorrecta e injustamente no han obtenido la pensión de veteranos de guerra. Hay motivos sobrados para pensar, para justificar ante la justicia, como lo estamos haciendo, que les corresponde este derecho”, dijo el letrado.
En este sentido fundamentó que “primero, porque estaban en Río Grande o en Ushuaia, eso es algo muy importante; segundo, porque hay que ser muy hipócrita para querer desconocer la historia y la realidad de que Río Grande en particular y Tierra del Fuego en general estuvieron en guerra”.
El Dr. Ghione esgrimió que “un hecho muy claro de esto es –y tenemos un mapa que pertenece a la Armada Argentina- que los aviones de combate decolaban para ir a atacar la flota británica o bombardear las posiciones inglesas en las islas, mayoritariamente de Río Grande”.
Agregó que en dicho mapa, “está muy claro qué derrotero hacían las aeronaves en sus misiones y mayoritariamente la Aviación Naval y algunos de la Fuerza Aérea, el grueso de estas operaciones con aviones de combate –cazabombarderos e interceptores- salían de Río Grande y de Ushuaia salían aviones de exploración. Solo a modo de excepción había aviones de combate que despegaban desde Río Gallegos, en Santa Cruz, en el caso de la Fuerza Aérea Argentina, algunos despegaban desde Río Grande, otros desde Río Gallegos y desde San Julián”.
Recordó que los dos Super Etendard que hundieron al destructor HMS Sheffield despegaron desde Río Grande, lo mismo a los que hundieron al STUFT Atlantic Conveyor y los que atacaron al portaaviones HMS Invencible, donde participaron dos Super Etendard de la Armada y cuatro cazabombarderos A4 Skyhawk de la Fuerza Aérea.
Aseguró el abogado que “la Operación Micado era mucho más que destruir a los Super Etendard. Querían destruir los tres Exocets que había, matar a todos los pilotos y a los mecánicos de los aviones. El día 16 de mayo de 1982, cerca de toda esta zona, patrullaba el destructor ARA Bouchard, que a determinada hora de la noche, detectan en el sonar movimientos inteligentes que, cuando tienen total claridad, son tres puntos que van desde el mar hacia Río Grande, moviéndose”.
Reveló el abogado que el Comandante del buque de guerra argentino, el Capitán de Fragata Washington Barcena, “consulta a su jefe que era el comandante del ARA Piedrabuena, otro destructor que estaba más hacia el sur, cerca de Ushuaia y le contesta el Piedrabuena que no han detectado nada”.
Agregó que el capitán Barcena “llama a los comandos de Río Grande y también le contestan que no han detectado nada, pero le dan la orden de que proceda y entonces proceden, cañoneando a estos tres puntos que luego desaparecen. Cuando ya el sonar no registra más nada, el Bouchard avanza hacia donde estaban estos tres puntos y detecta restos de gomones”.
Este incidente en el contexto bélico hizo que el Comandante del Bouchard informara al Comando Naval en Río Grande “que por precauciones envía a la playa a la Infantería de Marina donde encuentran un gomón, presuntamente inglés”.
Recordó que al día siguiente, el 17 de mayo, se conoce la caída de un helicóptero militar inglés Sea King en cercanías de Punta Arenas y tres de sus tripulantes fueron incluso entrevistados por la prensa chilena. “Este helicóptero también había sido detectado por el Bouchard, por su cercanía y no hay seguridad de qué destino tenía esta aeronave; hay quienes hablan de que se había acercado mucho el portaaviones y hay otros que decían que este helicóptero venía desde Chile. Lo que sí se sabe es que cuando este aparato militar se cae –que tampoco hay precisiones- se discute si lo derribó la Argentina o si lo voltearon los propios ingleses o si se cayó por desperfectos mecánicos”.
En la Operación Micado, como se conoce a todos estos hechos ocurridos entre el 16 y 17 de mayo de 1982, “estaban viniendo dos aviones tipo Vulcan desde la Isla Ascensión, que cuando se enteran de que cae este helicóptero, pegan la vuelta y regresan a esta base”.