Lo confirmó el Municipio de Río Grande. Se trata de la sucursal ubicada sobre 25 mayo de supermercado La Anónima, tras constatar que se encontraba comercializando productos que están por fuera de los avalados por la normativa vigente, no siendo estos de primera necesidad.

Así se incumplió la medida establecida en el marco de los protocolos de acción ante la emergencia sanitaria producto del COVID-19 (Coronavirus).

Desde el Municipio se reiteró que únicamente se pueden comercializar los productos catalogados como de primera necesidad, a saber: alimentos, bebidas, elementos de higiene personal, limpieza y veterinarios.

Queda suspendida la venta de cualquier otro producto que no se encuadre en los mencionados precedentemente, para evitar la demora en los comercios y la competencia desleal con los establecimientos comerciales de la ciudad que han cerrado sus puertas.

El incumplimiento de las medidas dispuestas, durante el transcurso de la emergencia sanitaria, dará lugar a las sanciones que correspondan ante el caso.