En un fallo con disidencias estableció que la reducción del IVA y del Impuesto a las Ganancias que decidió Mauricio Macri por decreto no puede afectar los fondos de coparticipación que corresponden a las provincias.
En rigor, la acordada de los jueces deja en pie la rebaja para los consumidores, pero obliga a la Casa Rosada a compensar a las provincias por la pérdida de recursos que implicaría para esos distritos dejar de percibir la parte coparticipable del IVA que les gira la Nación mes a mes.
Lo mismo ocurre con los cambios dispuestos en el impuesto a las Ganancias: el gobierno decretó una modificación en el monto imponible y la devolución del excedente pagado por los trabajadores durante este año. Pero ese alivio impactó en los ingresos provinciales.
La decisión de la Corte llegó a propósito de las presentaciones de 15 provincias, que habían recurrido al máximo tribunal para evitar perder esos fondos.
Según los cálculos del Gobierno nacional, el costo fiscal total de la rebaja del IVA a los alimentos alcanzará para todo 2019 los 10.000 millones de pesos, con lo cual, según el fallo de la Corte, la Casa Rosada deberá compensar a las provincias por 5.660 millones. Eso ocurre porque la ley de Coparticipación Federal de Impuestos indica que el 42,34% va al Tesoro Nacional y el 56,66% a las provincias, que a su vez destinan una parte a los municipios.
Si bien originalmente se especulaba con que la decisión judicial quedaría para después de las elecciones, los cinco miembros del Máximo Tribunal comenzaron a evaluar el tema y se decidió avanzar con el tema antes de la elección general.
Tres de los jueces (Lorenzetti, Rosatti y Maqueda) se inclinaron por fallar a favor de los gobernadores.