Al menos cincuenta rectores de Universidades Nacionales consensuaron el proyecto de Presupuesto 2017 y aprobaron, por unanimidad, un sistema de distribución distinto al fijado por el Gobierno Nacional, en relación al refuerzo presupuestario por 500 millones contemplado para este año.
El rector de la Universidad Nacional de Tierra del Fuego, Juan José Castelucci, confirmó que próximamente las Universidades Nacionales enviarán a la Secretaría de Políticas Universitarias (SPU) el Presupuesto 2017 por un monto de $ 84.890.000.000. La cifra implica una suba de $ 33 mil millones para el sistema universitario nacional, casi un 40 % más del correspondiente a este año.
El proyecto fue consensuado días a atrás, en el marco del Plenario extraordinario de Rectores del Consejo Interuniversitario Nacional celebrado en San Miguel de Tucumán, en vísperas de los festejos por el Bicentenario de la Independencia Argentina, que tuvo como sede a la capital norteña.
Durante la sesión de trabajo el ministro de Educación y Deportes de la Nación, Esteban Bullrich, se refirió a que el refuerzo presupuestario por $ 500 millones, que prometió hace dos meses el presidente, Mauricio Macri, debe ser destinado a sostener el crecimiento de las tarifas de los servicios públicos, a raíz de las quejas realizadas por el sector. En ese marco, uno de los mecanismos estipulados oficialmente sería el desembolso de dinero a contra factura.
Ante esta situación Castelucci destacó: “Tenemos que defender la autonomía de la Universidades públicas y eso quedó expresado en el comunicado consensuado por todos los rectores, ya que cada Universidad tiene necesidades distintas qué atender”, sostuvo.
En el marco del Plenario se discutió la distribución de la asignación por parte del Poder Ejecutivo Nacional del refuerzo para el presupuesto 2016, estipulado por quinientos millones de pesos.
Del total, se propuso que cuatrocientos millones de pesos se distribuyan según el Modelo de Pautas Objetivas del CIN para la distribución de presupuesto, resultado del trabajo técnico conjunto de todas las instituciones universitarias nacionales y consensuado hace más de dos décadas para la asignación del presupuesto que el Congreso Nacional otorga cada año para el sistema universitario público.
En tanto, que los cien millones de pesos restantes se destinen a la atención de la problemática de gastos de funcionamiento de las universidades que no están incorporadas al modelo y para la atención de casos que registren particularidades no contempladas por dicho modelo.
Esta distribución permitiría a cada institución universitaria hacer frente a los mayores costos según sus propias prioridades.