Tras los allanamientos del 20 de agosto que desbarataron una red que regenteaba un privado en Río Grande, el fiscal federal Marcelo Rapoport señaló públicamente que una remisería allanada, tenía vinculaciones con el delito investigado. Ahora desde la remisería APRAR le reclaman rectificar esto o bien precisar quienes son los involucrados, dado el perjuicio económico ocasionado por los dichos del funcionario judicial.
La pasada semana se produjo una serie de allanamientos ordenados desde la Justicia Federal en relación al funcionamiento de un privado en la calle Cabe Benítez al 800 del barrio AGP, con la detención de tres personas que explotaban sexualmente a cinco mujeres.
Entre los allanamientos se realizó uno en la agencia de remises de la APRAR, Asociación de Permisionarios de Remis Auto Rio, en el cual se aclaró que la agencia no guardaba relación con la maniobra ilícita, más allá de ser contratada para sucesivos viajes de las mujeres.
Ante ello el allanamiento se limitó a los registrados de viajes de parte de la agencia, pero luego el fiscal Marcelo Rapoport señaló en distintos medios que “APRAR era la remisería con la que trabaja este privado”.
En tal sentido desde esta agencia enviaron una carta documento al funcionario judicial a fin de que “ratifique o rectifique sus dichos”, señalando el responsable de la misma, “pretende involucrar a la agencia” por lo que “lo intimamos a que en forma inmediata informe los nombres del personal involucrado para adoptar con urgencia las medidas correspondientes”.
Asimismo reservan ir en denuncia ante el Procurador General de la Nación como así también “reclamar judicialmente al Estado Nacional por los daños y perjuicios causados a esta agencia que cuenta con 30 años de trayectoria y que genera trabajo a más de 70 familias en esta ciudad”.
El abogado de la agencia, el Dr. Maximiliano Palladino señaló al respecto: