Comenzó en los tribunales de Campamento YPF el juicio oral y público a Claudio Alejandro Ayala de 38 años, detenido desde el 30 de septiembre pasado, luego de violar reiteradamente la prohibición de acercamiento a su pareja.
La fiscal acusó a Ayala de tener una prohibición de acercamiento tras un episodio de violencia de julio del año pasado, que el imputado violó el 29 y el 30 de septiembre siguientes, en un lapso de pocas horas.
Ayala fue denunciado por la mujer por disturbios en su domicilio el 29 de septiembre, fue detenido y dejado en libertad a las pocas horas, tras lo cual volvió al mismo domicilio donde la agredió a golpes y sustrajo un celular.




Allí quedó finalmente detenido hasta la realización de este juicio en el que la fiscalía acusa de los delitos de “lesiones agravadas en contexto de Violencia de Género”, “violación de domicilio”, “desobediencia” y “robo”.
Ayala accedió a declarar y refirió haber estado consciente de la prohibición de acercamiento pero que la misma vencía el 24 de agosto, una versión que no aparece en ningún papel oficial o notificación alguna y que el imputado no supo bien justificar. La única notificación que consta en la causa dice que la prohibición es “hasta nueva orden”.
Señaló que volvió a la vivienda luego de vencido ese plazo por pedido de la víctima y desconoció hechos de violencia el 29 de septiembre en su primer detención, reconociendo que al día siguiente tras ser liberado, si agredió a la mujer, por lo que pidió perdón. Manifestó que la agresión fue por que encontró mensajes en su celular con otra persona.
En cuanto a la sustracción del celular, refirió que el aparato era suyo, aunque era de uso común entre la pareja ya que la mujer tenía cuentas en el teléfono.
Finalmente se proyectó la testimonial de la víctima quien dio cuenta en una extensa alocución de las agresiones sufridas desde el mes de julio de 2024 en adelante y que mantuvo una relación de 5 años con el imputado.
El tribunal pasó a un cuarto intermedio hasta el martes, ocasión en la que declarará una amiga de la víctima y luego serán los alegatos.