En contramano a los tiempos que corren el oficialismo municipal en el Concejo Deliberante de Ushuaia presentó un proyecto que atrasa en el tiempo. Más impuestos y más estructura estatal.

El proyecto parte de la bancada Justicialista del concejal Gabriel de la Vega con el impulso desde el propio municipio de Ushuaia y ya cosechó críticas entre los operados del rubro en la capital provincial, generando otra desventaja o desaliento al turista.

El proyecto pretender la creación de un ente turístico municipal y el impuesto a los turistas al momento de alojarse, de 5 unidades fiscales para los turistas nacionales y 10 unidades fiscales para los extranjeros.

Esto es calculado en un gravamen de 10 mil y 20 mil pesos respectivamente por persona, en una medida que ya es cuestionada constitucionalmente en otros centros turísticos donde tiene vigencia, tal el caso de Bariloche.

Más allá de eso, los operadores locales señalan que esta tasa municipal que se quiere imponer en Ushuaia “representan entre el 20 y el 50% del costo de alojamiento de un turista y comparando con Bariloche llega a ser entre 20 y 50 veces superior en los segmentos más utilizados”.
Asimismo desde la Cámara de Turismo de Ushuaia, cuestionaron que “el proyecto implica la des financiación y derogación de la ordenanza que indica cómo se financia el Ushuaia Bureau, que es el ente mixto que se dedica a la promoción y desarrollo turístico”.