El fiscal del caso el Dr. Eduardo Tepedino señaló, “estamos convencidos de que la prueba es mas que suficiente y permite sostener la acusación contra Roberto Calderón, tenemos pedidos solo de parte de la fiscalía 12 testigos, y es contundente la prueba en contra del imputado”, dijo. Tras la indagatoria se esperan los primeros testigos, uno de ellos crucial para la acusación, “hay un testigo muy próximo al lugar del hecho, no ve el momento del disparo, pero su narración dio impulso a la investigación y la acusación contra Calderón”, dijo Tepedino respecto de un joven que acompañaba a Quiróz al momento del crimen. El hecho tuvo lugar cuando Quiróz, quien había robado una campera en un local comercial la noche anterior, se presentó en la casa de Calderón para cambiarla por droga. Allí surgió “una discusión banal entre los dos, con uno de ellos muy alcoholizado –la víctima-, forcejeó y dio un golpe de puño, lo que dio lugar a una persecución y el disparo por detrás de la cabeza”, graficó el fiscal. Ante ello el fiscal acusará por el delito de “homicidio agravado por el uso de arma de fuego”, a pesar de que “ninguna de las armas recuperadas es del mismo calibre del disparo mortal, la bala recuperada por su deformación no se pudo determinar con certeza si era un calibre 38 o una 9 milímetros, pero no se condice con ninguna de las armas incautadas”, refirió el acusador. En ese sentido hay que destacar que Calderón estuvo prófugo por varias horas, lo que dificultó además el hallazgo del arma. ]]>