Según vecinos del domicilio de la tragedia, esta familia que había llegado de vacaciones el viernes pasado, hacía dos días que no era observada, lo que llegó a motivar la curiosidad de los ocupantes de una casilla vecina que se encuentra en el mismo predio.
Su vecino señaló, “mi mujer se acercó y vio luz, sintió ruido de agua corriendo y la televisión encendida por lo que pensamos que estaba todo bien”, señalando que esto fue el miércoles a las 17 horas, aseverando que este mismo panorama podía observarse en la presente mañana, por lo que se presume que los decesos datan del día de la víspera.
Esta mañana de jueves personal de la Base Aeronaval se llegó hasta la vivienda dado que Silvana Franco, quien era cocinera de la base, no se presentó a trabajar; constatándose allí que la puerta estaba abierta y la mujer así como su hija, estaban tendidas sin vida en sus respectivas camas.
La pareja de la mujer, quien solo pudo ser identificado como Sebastián, fue hallado en la ducha bajo el agua, inconsciente pero con vida, por lo que rápidamente fue trasladado en una ambulancia al Hospital Regional Río Grande, cuyos facultativos certificaron la muerte de los otros dos ocupantes de la vivienda, quienes quedaron en el lugar para la realización de pericias detalladas.
Personal policial y técnico de la División Bomberos convocaron a Camuzzi para llevar adelante la verificación de los artefactos, presumiéndose que la pérdida de monóxido se habría producido en el calefón de la vivienda.
Un indicio de la tragedia
El vecino de la familia de la tragedia relató que el pasado martes la pequeña Candela de 4 años tuvo convulsiones muy fuertes y reacciones que motivaron el llamado de sus padres a una unidad de emergencia para tratarla, situación que también se habría registrado unos días antes.
En relación a este incidente ahora se estima que la reacción de la pequeña pudo responder a una leve intoxicación por monóxido, a partir del escape que ya se estaba produciendo y que días después se cobraría la vida de ella y de su madre.