La víctima de este hecho, Juan Carlos Dos Santos, declaró ante el tribunal y relató como levantó en el puente Mosconi a Alvarez – a quien conocía con anterioridad- junto a otras dos personas que no reconoció, para trasladarlos al asentamiento. Allí aseguró que lo invitaron a tomar una cerveza, por lo que bajó y al trasponer la puerta, lo encapucharon y comenzaron a golpearlo para sustraerle todo el dinero.

Indicó que además de los golpes lo encañonaron con un arma de fuego, no pudiendo reconocer más personas a causa de tener los ojos vendados.

En estas declaraciones el testigo incurrió en varias contradicciones, ante lo cual el fiscal Guillermo Garone aseguró, “está bien que los defensores marquen las contradicciones pero para mi no afectan la parte sustancial del relato, los hechos están probados que sucedieron, identificó a Alvarez y en cuanto a Irrutia tenemos que fue detenido en un cajero con la tarjeta de débito de Dos Santos y su auto que se los habían sacado en ese mismo momento, además de las filmaciones del cajero que muestran que fue en dos oportunidades, y que todo coincide con lo relatado por la víctima”, expresó.

Ante las contradicciones los defensores oficiales Mariano Sardi y Aníbal Acosta pidieron incorporar por lectura la primera declaración de Dos Santos, lo que fue impedido por los jueces para mantener la espontaneidad del relato efectuado por la víctima en esta instancia oral.

El juicio pasó a un cuarto intermedio para este jueves en que las partes llevarán a cabo los alegatos.