El Presidente el Instituto Provincial dela Vivienda, Luis Cárdenas, destacó el nivel de recupero de la institución, el tercero más importante del país, aunque reconoció que resta actualizar entregas de unidades habitacionales. Detalló pasivos ambientales en Río Grande y Ushuaia y la entrega de 370 viviendas en las próximas semanas.

En el marco de la Comisión de Presupuesto de la Legislatura, el Presidente del IPV aseguró que existen expectativas de obtener más líneas de financiación.

Cárdenas sostuvo que en el caso de Río Grande, se aproximan condicionamientos en materia de acceso a la tierra. “Y en Ushuaia, se viene llevando adelante un plan, no solo de viviendas –dijo-, sino también con inversión en infraestructura”.

El Funcionario afirmó que en ambas ciudades “tenemos un pasivo ambiental” y lo adjudicó a “desaciertos de gestiones que nos han colocado en una situación con niveles de contaminación alarmantes”.

Cárdenas describió que “Margen Sur, es el gran desafío que tiene el IPV”. Se trata de un populoso sector donde viven 20 mil personas.

“Se trata de una zona que va a necesitar mucho acompañamiento” de las políticas públicos, aseguró y adelantó que, se firmarán convenios en lo que va de la semana, desde la cuestión dominial a la provisión de agua y cloacas.

En otro orden, Cárdenas remarco la asistencia que se logra desde Nación, en cuanto a la planta de efluentes. La calificó de “obra muy onerosa para la Provincia, pero logramos asistencia” desde el Gobierno central.

En cuanto a la entrega de unidades habitacionales, Cárdenas anunció que “estamos cerca de 300 viviendas para Ushuaia” y serán entregadas entre la última semana de noviembre y primera de diciembre. Y otras 70, serán para la segunda quincena de noviembre en Río Grande.

Por ultimo aseguró, “tenemos previsibilidad de obras para los próximos meses” aunque evaluó que el desafío es “lograr un punto de inflexión que nos permita salir de la problemática habitacional de la Provincia”.