Ocurrió en el Colegio Kloketén de Ushuaia donde el conflicto se siente desde el primer día y todavía hay al menos quince docentes en medidas de fuerza. Luego de una asamblea que no fue notificada a la dirección, una docente denunció en sede policial que una compañera que se encuentra de paro le dio una patada en la espalda por diferencias en el marco del conflicto.

La comunidad educativa del Colegio Kloketén todavía no sale de su asombro por las dimensiones que ha tomado el conflicto. Ayer una docente que se encuentra en medidas de fuerza desde el inicio del conflicto pateó por la espalda a una compañera de trabajo que –por otro lado- dicta clases con normalidad.

“El colegio viene teniendo una serie de inconvenientes hace un tiempo que se vienen agudizando desde la semana pasada, esto tiene que ver con el conflicto, los días de paro y las medidas de fuerza que nos afectan a todos”, contó en Fm Aire Libre la directora del colegio Paola Sánchez.

Y remarcó que “a partir de la semana pasada, el día jueves, comenzaron a hacerse nuevamente las asambleas dentro de la institución, cuando esto ya había dejado de suceder, dado que la gran mayoría de los docentes que están de paro, entiendo celebran las asambleas en el espacio del acampe”.

“El jueves volvieron a hacerla dentro de la escuela, no se hizo el pedido formal que está establecido por la normativa desde el gobierno, entonces me acerqué al aula donde se realizaba la asamblea para informarles que esa asamblea no correspondía con la normativa vigente porque no había sido solicitaba, por eso les pedía que se hiciera la nota y el encuentro se realizara al día siguiente. Esto no lo aceptaron y se realizó la asamblea en el marco de algunos comentarios desagradables”, contó.

En tanto el viernes nuevamente se realizó una asamblea sin autorización, y el lunes se complicó más porque se presentó el dirigente Horacio Catena en la institución “informándome que yo no conocía la normativa, que había una Ley de Asociaciones Sindicales que a él lo avalaban, que no me iba a recibir ninguna notificación ningún integrante del gremio y que él iba a llevar adelante las asambleas en el colegio a la hora que le pareciera”.

Sánchez relató que Catena “entró al colegio con un grupo de quince docentes que son nuestros propios compañeros de trabajo que se encuentran en medidas de fuerza, realizando una asamblea en la cual no participaron docentes que estaban dando clases. Se instalaron en una de las aulas y cuando termina la asamblea queda un grupo reducido de personas que son docentes del establecimiento, soy alertada por un trabajador que había una docente que había sufrido un golpe por parte de otra de estas que había ingresado solamente a partir de esta asamblea y que está de paro desde el día 1 de este conflicto”.

“Me tocó intervenir, contener a la docente y asesorarla y acompañarla a la Comisaría donde realizó la denuncia correspondiente. Su compañera básicamente le propinó una patada en la espalda”, dijo.
“Ambas docentes tuvieron la oportunidad de hacer notas de descargo y ambas notas fueron elevadas a los supervisores”, cerró.