Es en el marco de la causa iniciada en la capital provincial donde se detectaron compras en el comercio capitalino con tarjetas clonadas e identidades fraguadas. Al salir de la isla vía aérea uno de los cuatro brasileros imputados, fue detenido en Buenos Aires donde se le allanó un departamento transformado en un verdadero laboratorio informático.

Los clonadores tenían su cueva en Buenos Aires, en un departamento del barrio de Palermo.

El laboratorio se encontraba ubicado en un departamento de alquiler temporario ubicado en la Av. Córdoba al 6000.

“Por eso, coordinamos el trabajo con la policía de la Ciudad de Buenos Aires. El área de ciberdelitos de la Ciudad de Buenos Aires destacó el trabajo de nuestra policía provincial porque permitió darle el golpe final a una banda que venía delinquiendo desde hacía tiempo”, comentó el secretario de Seguridad Javier Eposto.

En el operativo se detectaron bandas magnéticas, conectores de ingreso, skimmer (dispositivo que extrae la información de la tarjeta, es un lector de banda magnética), computadoras, notebook, documentación falsa, boquillas, tarjetas en blanco e impresora de tarjetas.

La banda estaba compuesta por cuatro personas. Uno que se dedicaba a clonar, con conocimiento de sistemas. Los otros tres se dedicaban a buscar información de las víctimas en distintas entidades bancarias por medio de conectores de ingreso (que se colocan en el lugar de ingreso de las tarjetas) y boquillas (aparatos que se colocan en las puertas de los bancos).

Mientras continúa la investigación, la jueza Dra. Barrionuevo requirió a la Cancillería que averigüe ante el Poder Judicial de Brasil, la titularidad de las huellas dactilares de los detenidos. Esto se debe a que se tiene todavía dudas sobre la identidad real de estas personas.